La líder del PJ arremetió contra el nuevo acuerdo de 20 mil millones con el FMI, tildó a Caputo de “patinador serial” y recordó la deuda de Macri. ¿Salvavidas o desastre inminente?
En un nuevo capítulo de la polarizada escena política argentina, Cristina Fernández de Kirchner, actual presidenta del Partido Justicialista (PJ), lanzó una feroz crítica contra el gobierno de Javier Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo, tras confirmarse un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 20 mil millones de dólares. Desde su cuenta en redes sociales y en un tono que mezcla ironía y acusaciones contundentes, la exmandataria no solo cuestionó la gestión económica actual, sino que también apuntó al pasado de Caputo, a quien calificó como un “patinador serial de dólares ajenos”.
El anuncio del préstamo, confirmado esta semana por el propio Caputo, desató una ola de reacciones, pero fue la voz de Fernández de Kirchner la que resonó con más fuerza. “¿Me podés explicar cómo es que te van a dar 20 mil millones?”, disparó en referencia a Milei, a quien acusó de incoherencia por haber rechazado al FMI durante su campaña y ahora recurrir a sus fondos. En un dardo directo, advirtió que el presidente “se va a fumar” ese dinero de aquí a las elecciones legislativas de octubre, sugiriendo que el préstamo no se traducirá en beneficios tangibles para la población, sino en una herramienta de corto plazo para sostener la gestión.
Sin embargo, el foco principal de su artillería fue Caputo. Fernández de Kirchner lo señaló como el responsable no solo de esta nueva deuda, sino también de los 45 mil millones de dólares tomados durante el gobierno de Mauricio Macri, de los cuales él fue un actor clave como ministro de Finanzas y titular del Banco Central. “Patinador serial de dólares ajenos”, lo llamó, un calificativo que busca instalar la idea de una gestión económica irresponsable y especulativa. Según la líder del PJ, la suma de ambos préstamos eleva la deuda con el FMI a 65 mil millones de dólares, una cifra que, afirmó, “no va a parar a los bolsillos de los argentinos”.
La crónica de este enfrentamiento se enmarca en un contexto de creciente tensión económica y política. Mientras el gobierno de Milei defiende el acuerdo como una necesidad para estabilizar las cuentas públicas y evitar un default, las críticas desde la oposición no se hicieron esperar. Posts recientes en X reflejan el malestar de sectores que ven en esta decisión una contradicción con el discurso libertario de rechazo a las instituciones multilaterales. Aunque estas publicaciones no son evidencia concluyente, sí muestran un sentimiento de desconfianza que Fernández de Kirchner supo capitalizar en su relato.
A medida que se acercaooctubre, nes de las elecciones, el cruce entre Fernández de Kirchner, Milei y Caputo promete mantener el debate económico en el centro de la escena. Por ahora, la titular del PJ no da tregua y, entre dardos y reproches, pone en jaque la narrativa oficialista. ¿Será este nuevo préstamo un salvavidas o una bomba de tiempo? La respuesta, como siempre, quedará en manos del tiempo y de los argentinos.
