El gobernador Axel Kicillof y la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), a cargo de Cristian Girard, anunciaron una significativa rebaja del Impuesto Inmobiliario Rural para los productores agropecuarios de la provincia. Esta medida, que se implementará en 2025, busca aliviar la carga fiscal de los contribuyentes rurales, ofreciendo descuentos que pueden llegar hasta el 15%.
La reducción del impuesto se debe a una combinación de factores políticos y macroeconómicos. Entre ellos, destaca la inflación proyectada alrededor del 70% anual, lo que en términos reales disminuye significativamente el peso del impuesto. Además, la falta de aprobación de la Ley Fiscal 2025 y la reintroducción de bonificaciones para los contribuyentes cumplidores han sido determinantes en esta decisión.
Descuentos Disponibles
ARBA ha comunicado la vuelta de varios descuentos para los contribuyentes que mantengan su situación fiscal regularizada. Los descuentos disponibles son:
- Pago anual anticipado: Hasta un 15% de descuento.
- Buen cumplimiento: Descuento del 5% para quienes no tengan deudas hasta cinco días antes del vencimiento.
- Débito automático: Reducción del 5% por cuota más un 5% adicional por estar al día.
Impacto en los Contribuyentes
Según datos oficiales, la carga impositiva del Impuesto Inmobiliario Rural se ha reducido un 16,3% en total entre 2019 y 2024. Esta política fiscal diferenciada busca favorecer a los pequeños y medianos productores, mientras se mantiene un esquema más exigente para los propietarios de campos de mayor valuación.
Cronograma de Vencimientos
El cronograma de vencimientos del impuesto para 2025 es el siguiente:
- Cuota 1: 8 de abril.
- Cuota 2: 12 de junio.
- Cuota 3: 11 de septiembre.
- Cuota 4: 12 de noviembre.
Opinión de Expertos
Economistas destacan que, aunque el valor nominal de la primera cuota de 2025 será el mismo que en 2024, los descuentos aplicables reducirán significativamente la carga fiscal en términos reales. Un productor que pagó $100.000 en 2024, por ejemplo, pagará el mismo monto nominal en 2025, pero con descuentos podría reducirse a $85.000.
Esta medida ha sido bien recibida por los sectores agrarios, que ven en ella un alivio necesario frente a la creciente presión impositiva y la inflación.