En el marco de la campaña electoral de la Provincia de Buenos Aires, el oficialismo tiene decidido centrar sus esfuerzos en confrontar con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, en lugar de la exmandataria Cristina Kirchner. Según fuentes de la Casa Rosada, Kicillof es considerado actualmente «el referente del peronismo».
La Libertad Avanza, liderada por Javier Milei, optó por enfocar sus críticas y ataques en Kicillof, quien gobierna una provincia con 7 millones de votos. En una reciente entrevista, Milei mencionó a Kicillof diez veces, mientras que solo hizo referencia a Cristina Kirchner en tres ocasiones. Esta elección estratégica se debe a la percepción de que Kicillof representa una amenaza más directa y relevante en el contexto electoral actual.
La Devaluación de la Figura de Cristina Kirchner
En la Casa Rosada se habla de una «devaluación» de la figura de Cristina Kirchner. La exmandataria, que en otros tiempos fue una figura central del peronismo, parece haber perdido peso político frente a Kicillof. Esta percepción se ha visto reflejada en la falta de respuesta de Milei a los tweets críticos de Kirchner, mientras que ha sido mucho más vocal en sus ataques a Kicillof.
El Enigma del Desdoblamiento
Otro factor que añade complejidad a la situación es el «enigma» del desdoblamiento de las elecciones en la Provincia. Kicillof enfrenta la decisión de si desdoblar o no las elecciones provinciales de las nacionales, lo cual podría tener un impacto significativo en la dinámica electoral. Esta decisión es un punto de tensión entre Kicillof y Kirchner, y podría influir en la estrategia de campaña de ambos lados.