En una reunión para delinear estrategias electorales, el PRO bonaerense criticó duramente al gobernador Axel Kicillof y mostró su intención de formar frentes amplios con el objetivo de derrotar al populismo en la provincia. La potencial alianza con La Libertad Avanza sigue generando debates internos en el partido.
En medio de un clima político tenso y con miras a las elecciones legislativas de este año, el PRO bonaerense se reunió este lunes en la sede del partido en San Telmo para definir sus estrategias electorales. Durante el encuentro, los dirigentes del partido liderado por Mauricio Macri criticaron duramente al gobernador Axel Kicillof y mostraron una clara «vocación frentista» para enfrentar al kirchnerismo.
El presidente del PRO bonaerense, Cristian Ritondo, encabezó la reunión que contó con la participación de numerosos intendentes y legisladores de la provincia. En su discurso, Ritondo destacó que el objetivo principal del partido es «terminar con el populismo» que, según su visión, ha llevado a la provincia a una situación de pobreza, inseguridad y deterioro institucional.
«El PRO bonaerense nació con vocación frentista, siempre apostando a la construcción de espacios amplios para transformar la realidad. Pero, a diferencia del kirchnerismo, que solo usa las alianzas para perpetuarse en el poder, nosotros creemos en la unidad para cambiar en serio la provincia», afirmó Ritondo.
En medio de las críticas a Kicillof, el PRO también hizo un guiño a La Libertad Avanza (LLA), liderada por Javier Milei, aludiendo a la posibilidad de una alianza electoral. Sin embargo, la reunión también evidenció posturas enfrentadas dentro del propio partido sobre la conveniencia de unirse a LLA. Mientras algunos dirigentes, como Soledad Martínez y Guillermo Montenegro, abogaron por la alianza, otros, como Silvia Lospennato, prefirieron mantener la identidad del PRO.
El comunicado final de la reunión subrayó el compromiso del PRO con los bonaerenses y su intención de construir un Estado eficiente, transparente y enfocado en resolver los problemas reales de la gente, en lugar de sostener los privilegios de la política.
Con las elecciones a la vuelta, el PRO bonaerense busca fortalecer su armado territorial y definir su posición en un escenario político cada vez más complejo y competitivo.
