El gobernador Axel Kicillof, evalúa adelantar los comicios provinciales en una movida que podría redefinir su futuro político. Con la posibilidad de que el Congreso elimine las PASO, busca distanciarse de Cristina Kirchner y consolidar su liderazgo en un contexto electoral incierto. ¿Logrará su objetivo antes de que se agoten las oportunidades?
Axel Kicillof se encuentra en una encrucijada política mientras considera desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales. Mientras busca fortalecer su posición como líder del peronismo, está condicionada a la posibilidad de que el Congreso elimine las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Según fuentes cercanas al gobernador, si el gobierno nacional logra su objetivo de eliminar las PASO, Kicillof podría adelantar los comicios provinciales para distanciarse de la influencia de Cristina Kirchner y posicionarse como un candidato fuerte para el futuro.
Kicillof enfrenta presiones tanto internas como externas. Por un lado, la presión de Cristina Kirchner y La Cámpora es significativa; Kirchner ha manifestado su oposición a la idea de desdoblar las elecciones, argumentando que esto podría fragmentar el voto peronista y debilitar al partido en un momento crítico.
Por otro lado, el gobernador también debe considerar la situación del partido La Libertad Avanza, que enfrenta dificultades para presentar candidatos en los 134 municipios de la provincia.
La propuesta de Kicillof de desdoblar las elecciones no es nueva, pero cobra relevancia en el contexto actual. Al hacerlo, espera complicar la estrategia electoral de Javier Milei y su partido, ya que un desdoblamiento dificultaría la polarización que Milei busca establecer con Kirchner. Sin embargo, Kicillof ha decidido esperar a ver cómo se desarrollan las negociaciones en el Congreso respecto a las PASO antes de tomar una decisión definitiva sobre el cronograma electoral.
Si Kicillof logra avanzar con su plan de desdoblamiento, podría consolidar su posición dentro del peronismo y presentarse como un candidato viable para futuras elecciones nacionales. Sin embargo, esto dependerá en gran medida del apoyo que reciba dentro del partido y del resultado de las negociaciones sobre las PASO. La falta de consenso interno y la necesidad de alinear su estrategia con la dirección política del partido complican aún más su situación.
