El encuentro convocado en La Plata por Julio Garro para reunir a dirigentes del PRO y la UCR bonaerense se postergó para el 18 de marzo, oficialmente debido a la emergencia que atraviesan miles de vecinos en el sur de la Provincia. Sin embargo, la reprogramación también ocurre en un contexto de alguna incertidumbre sobre las asistencias y en medio de una interna que profundiza la grieta dentro del PRO.
Si bien el cambio de fecha fue justificado por la necesidad de priorizar la asistencia a los damnificados, lo cierto es que la convocatoria ya venía perdiendo peso. Diego Santilli y Guillermo Montenegro habían evaluado bajarse, y a ellos se podrian sumar varios legisladores y alcaldes alineados con su postura. Además, Cristian Ritondo—quien en un principio respaldaba la reunión—también empezó a tomar cierta distancia, debilitando un poco la cumbre.

Interna caliente y juego de presiones
La grieta dentro del PRO bonaerense sigue creciendo. Mientras un sector busca recomponer la alianza con la UCR y fortalecer un espacio opositor propio, otro empuja un acuerdo con La Libertad Avanza. Santilli y Montenegro se ubican en este último grupo y consideran que acercarse nuevamente a los radicales sería un error estratégico de cara a 2025.
Además, la banda joven del PRO—un sector emergente que busca imponer su impronta en el partido—también habría jugado un rol clave en el intento de desinflar la convocatoria.
¿Se sostiene la cumbre o se diluye?
El cambio de fecha al 18 de marzo abre nuevos interrogantes. ¿Logrará Garro sostener la convocatoria y reunir a los principales dirigentes del PRO y la UCR, o la postergación terminará siendo el primer paso hacia la cancelación definitiva?