La Legislatura de la provincia de Buenos Aires no logró avanzar con la discusión sobre la posible suspensión de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), luego de que la sesión especial convocada para este miércoles fracasara por falta de quórum. El debate, impulsado principalmente por el bloque de La Libertad Avanza (LLA), sigue empantanado en el juego de poder interno del peronismo.
La convocatoria partió del presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Alexis Guerrera, tras un pedido formal del espacio libertario. La intención era debatir un proyecto presentado por el titular de la bancada de LLA, Agustín Romo, que proponía suspender las primarias, en línea con el argumento del Gobierno nacional y el propio gobernador Axel Kicillof, quien ya se manifestó a favor de dejarlas sin efecto este año.
Sin embargo, la sesión naufragó antes de comenzar. Pese a sumar respaldos del PRO, la Coalición Cívica y hasta nueve legisladores de Unión por la Patria cercanos al Ejecutivo provincial, los libertarios no consiguieron reunir los 47 diputados necesarios para habilitar la discusión en el recinto.
En la Cámara baja bonaerense hay varias iniciativas sobre la mesa que apuntan en el mismo sentido. A la de Romo se suma la de la diputada del PRO Florencia Retamoso, cercana al sector que responde a Patricia Bullrich, que plantea redireccionar los fondos de las PASO a la emergencia en Bahía Blanca. También está vigente un proyecto del massista Rubén Eslaiman, aunque sin avances concretos.
La definición, no obstante, sigue atada al oficialismo provincial. Unión por la Patria mantiene frenado el debate desde hace meses, atravesado por las diferencias internas que impiden acordar una estrategia común. El principal escollo es la disputa sobre el posible desdoblamiento de las elecciones nacionales, una jugada que reconfiguraría por completo el escenario político bonaerense.
Mientras tanto, Kicillof sostiene su postura a favor de la suspensión, aunque en paralelo cumplió con el trámite legal de convocar a las PASO mediante decreto. La decisión final dependerá de cómo se acomoden las piezas dentro del peronismo y de la voluntad de bajar o no al recinto con el número suficiente para abrir el debate.
Por ahora, el futuro de las PASO en la provincia de Buenos Aires sigue en suspenso, con impacto directo en el calendario electoral y en las estrategias de los distintos espacios políticos que ya miden fuerzas de cara a un año clave.