La Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) atraviesa un conflicto tras un nuevo bochazo masivo en la cátedra de Microbiología y Parasitología, que dejó a más del 80% de los estudiantes desaprobados y generó una fuerte reacción en la comunidad académica.
En respuesta, el Centro de Estudiantes convocó a una reunión con las autoridades de la facultad y los responsables de la materia para exigir soluciones ante la falta de docentes y los cambios en la modalidad de evaluación.
Un filtro que complica el avance académico
El conflicto estalló luego del último examen final de la materia, cuando solo 15 de los 85 inscriptos lograron aprobar. La situación afecta principalmente a estudiantes de quinto año que no pueden avanzar en la carrera debido a esta asignatura pendiente.
Según denuncian los propios alumnos, la implementación de un examen escrito como filtro previo a la evaluación oral, aplicada desde fines de 2023, dificulta aún más la aprobación de la materia. A esto se suma la escasez de docentes, lo que genera mesas de examen sobrecargadas y, según los estudiantes, evaluaciones que no reflejan con justicia su preparación académica.
Falta de respuestas y un reclamo histórico
El problema no es nuevo. La Facultad de Medicina ha experimentado un crecimiento significativo en su matrícula en los últimos años, pero sin un aumento proporcional de la cantidad de profesores ni mejoras en la infraestructura. Esta situación ha derivado en una mayor exigencia para los docentes disponibles y dificultades en la calidad educativa.
Desde la agrupación Remediar, que lidera el Centro de Estudiantes, cuestionaron la falta de respuestas de las autoridades y criticaron la postura de la cátedra. «Nos alarma que lejos de hacer autocrítica por la enorme cantidad de desaprobados, sigan sin escuchar a los estudiantes y pongan trabas para que podamos avanzar», expresaron a través de sus redes sociales.
Incertidumbre de cara al ciclo 2025
En medio de la polémica, las inscripciones para el próximo ciclo lectivo aún no fueron habilitadas y recién se espera su apertura para la primera semana de abril. La incertidumbre sobre la organización académica y la falta de respuestas concretas por parte del Rectorado y el Decanato agravan la preocupación de los estudiantes.
Mientras se aguardan definiciones tras la reunión con las autoridades, la crisis en la Facultad de Medicina pone en evidencia los desafíos estructurales que enfrenta una de las unidades académicas más concurridas de la UNLP. La tensión entre alumnos y autoridades sigue en aumento, y la resolución de este conflicto será clave para garantizar la continuidad y calidad educativa de quienes transitan esta carrera.
