El próximo 23 de marzo, el sistema previsional argentino enfrentará un cambio significativo con la expiración de la última moratoria previsional. Esta reforma dejará a solo el 30% de los hombres y el 10% de las mujeres en condiciones de jubilarse con los requisitos actuales. Aquellos que no cumplan con los 30 años de aportes necesarios recibirán una Prestación Básica Universal al Adulto Mayor (PUAM), equivalente al 80% del haber mínimo, y solo podrán solicitarla a los 65 años.
Esta situación afectará especialmente a las mujeres, que deberán esperar hasta los 65 años para acceder a la PUAM, mientras que los hombres pueden hacerlo a los 60 años. La oposición, incluyendo el kirchnerismo y la izquierda, ha propuesto prorrogar la moratoria por otros dos años o implementar una prestación proporcional que ajuste los haberes según los años aportados.
Posiciones del Gobierno y la oposición
El presidente Javier Milei ha reafirmado que no habrá prórroga de la moratoria ni una reforma integral en el corto plazo. Esta postura ha generado un conflicto con sectores de la oposición que buscan evitar que una gran parte de la población quede fuera del sistema previsional. El titular de la ANSES, Mariano de los Heros, fue despedido por haber planteado públicamente la necesidad de una reforma.
Opiniones de especialistas
Rafael Rofman, investigador principal del CIPPEC, ha criticado el sistema previsional argentino como caro, injusto e ineficiente. Según Rofman, el país gasta en jubilaciones casi lo mismo que Bélgica, pero con la mitad de población adulta mayor. Propone una reforma integral que elimine las desigualdades y privilegios actuales.